lunes, 13 de marzo de 200618:43:42
Lo que sigue es una crónica de lo que sucedió el sàbado 11 de marzo, cuando una numerosa caravana de autos y micros que partiò desde la costanera norte frente al Club de Pescadores y al aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires, llegó hasta la Ciudad de Gualeguaychú y del trayecto que recorrió.
A media mañana se comenzaron a concentrar en la Costanera Norte una numerosa cantidad de automovolistas de particulares y organizaciones vecinales y dos micros aportados por la Central Argentina de Trabajadores.Eran miembros de diferentes organizaciones barriales que luchan por el espacio público, gente común sin ansia de protagonismo. Gente solidaria con ganas de llegar a destino.
Las únicas figuras reconocibles ,para el gran pùblico,eran la Madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas y el Presidente de Fedecámaras Rubén Manusovich.
Fedecámaras y el CTA fueron las únicas organizaciones importantes que se hicieron presentes, la primera con apenas un par de autos, la segunda con numerosos afiliados pero con ninguna de sus figuras públicas.
O sea era una caravana importante, pero vacunada contra la egolatría, con la gente como protagonista excluyente.
Allí en la Costanera había numerosos medios: TN, Amèrica 24, varias radios. Crónica TV que había comprometido su presencia brillaba por su ausencia. Ya para ésa hora se hablaba del "acuerdo" al que habrían arribado los Presidentes Kirchner y Tabaré Vazquez.
Curiosamente a partir de ese "anuncio" los "medios" desaparecieron como por arte de magia. La caravana partiò igual, con mal tiempo. pero con mucho ánimo.
Ya en la ruta se fueron plegando vecinos de la zona norte, luego en Escobar,donde la caravana hizo una parada tècnica, un camionero amigo solicitaba los carteles identificatorios.
Cuando finalmente la caravana arribò a destino llovìa torrencialmente, a pesar de lo cual numersos vecinos se hacìan presentes en las calles agitando banderas y saludadndo con entusiasmo. Muchos autos del lugar también se sumaban a la caravana. Portaban como los autos que habìan partido de Buenos Aires ,banderas argentinas y uruguayas. Porque los contaminadores no preguntan de que nacionalidad es aquel al que contaminan.
En este punto la caravana se detuvo. El intendente de Gualeguaychù y el Obispo esperaban para realizar un acto pùblico, aprovechando el hecho generado por otros.
Los manifestantestantes no aceptaron el convite y siguieron hasta el corte.
Allì se juntò una multitud con las mas diversos matices: Los habìa del lugar, de la capital, pero tambièn de otras provinicas como Santa Fè.Habìa jòvenes y viejos. Habìa familias enteras con chicos muy chicos. En este ambiente familiar os lugareños aclaran que lo de ellos es a "cara descubierta" y "sin quemar llantas".
Es que ese movimiento no sòlo es diverso desde lo generacional, lo es tambièn desde lo social. La clase media y los mas humildes conviven con un sòlo objetivo.
Luego diversos oradores hicieron uso de la palabra. Sin consignas machaconas, sin gritos, sin estridencia, pero con mucho contenido y con mucha firmeza.
Un chico muy jòven me mostraba còmo se habìa comunicado con ambientalistas de otros paìses, inclusive Estados Unidos que seguìan con atenciòn el desarrollo de los acontecimientos.Còmo esta gente de paìses distantes y primermundistas se solidarizaba con la lucha del pueblo de Gualeguaychù.
Entre los diferentes oradores fue muy elocente el de la Asamblea de Quilmes que mostraba una botella con un lìquido negro, que no era otra cosa que el agua contaminada por la papelera Massuh. Hablò de la tràgica lista de muertos de ese vecindario como fruto de la contaminaciòn y celebraba que los de Gualeguaychù reaccionaran mucho àntes de que tuviesen èllos que inaugurar esa lista fatìdica.
Tambièn allì nos contaron como la papelera Botnia da cursos para los jòvenes de Fray Bentos ilusionándolos con un excelente trabajo. Como allì en verdad se establecerá un ènclave con "inmunidad de jurisdicciòn" para las papeleras, con lo que la Ley y la justicia uruguayas no podràn llegar hasta el lugar.
A la noche partimos. Los Asambleìstas debìan decidir si levantan o no el corte. Nos dieron la sensaciòn de poser una gran madurez como para adoptar la mejor soluciòn. Los "medios", siguieron ausentes
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