sábado, marzo 01, 2008

Too much monkey bussiness (demasiadas boludeces)

Chuck Berry compuso la canción que da título a este post.

Berry era un rocker negro con inusitada facilidad poética, y con antecedentes penales. Provenía de un medio marginal y había pasado parte de la adolescencia en un reformatorio.

Lo cierto es que en razón de eso la puritana sociedad norteameiricana siempre lo veía como potencial sospechoso de cualquier felonía que se le adjudicara. De allí que compusiera esa canción.





Dylan halló inspiración en la canción anterior para componer "Subterranean Homesick blues" conocida entre nosotros como "Tristezas de ausencia".



Habla de todos los convencionalismos tontos que se exigen y de como ahogan a la persona.



Allí proclama "No sigan a ningún líder".



Dylan había dejado de lado las letras protestatarias de su primera època y se habìa "electrificado".



Eso le valiò gritos de Judas y hachazos para desconectar sus equipos. Eso dio lugar a esta canción




Silvio Rodríguez ha sido comparado con Dylan aunque es sustancialmente distinto.

Lo cierto que es que sus aficciones poéticas y musicales no eran bien vistas por algunos burócratas cubanos.

Carlos Puebla, autor del hermoso "Hasta Siempre" decía que "la Nueva Trova no es nueva ni es cubana".

Fue expulsado de la TV, y tardaron en descubrir que verdad su lucha no era para volver al capitalismo, sino contra la estupidez burocrática.

Insipirado en esa situación compuso esa canción "Debo partirme en dos"



La estupidez macartista, la estupidez stalinista, o la estupidez posmo-progre "políticamente correcta", son todas estupideces.

De eso viven algunos, son los que mas juzgan, los que mas condenan, los que mas prejuzgan.

Prejuicios tenemos todos, son constitutivos e inherentes a la presona, y alguna función narcotizante cumplen, pero cuando abundan son sólo pereza intelectual, no advertir que la alternativa siempre es posible, y que el mundo es complejo y lleno de grises aunque ésto ya sea un lugar común