miércoles, mayo 28, 2008

Demasiado Ruido (conflicto con el campo)

A medida que avanza el malhadado conflicto con el agro la sensación de confusión es cada vez mayor.

No lo es en cuanto a lo que pretenden los actores principales.En ese sentido está claro que es una disputa entre beneficiarios de cuantiosas rentas que no quieren ceder un ápice de lo que ganan.

Lo es en cuanto a los confusos alineamientos que producen a un lado y al otro.

Rosario y Salta son ambos absolutamente ajenos a los intereses de la mayor parte de la población, que, sin embargo parecer confusamente responder a uno u otro, creyendo que defiende intereses propios.

Hemos visto, por ejemplo, Madres de Plaza de Mayo en ambos encuentros, tanto como para brindar un barniz de legitimidad a cada discurso.

La Presidenta las invoca de manera desafortunada en su discurso de Avellaneda, y, hace un elogio de su accionar, para criticar las medidas adoptadas por los sectores rurales.

Nada tiene que ver una cosa con la otra, y, siguiendo ese orden de razonamiento, la lucha de las Madres, podría también servir para descalificar a los piquetes de los desocupados.

En tanto, en Rosario, se hizo presente la Madre de Plaza de Mayo Darwina Galicchio, lástima que allí estaba también presente Cecilia Pando entre otros.

Lo cierto y verdad es que nuevamente el "humo" y la "guerra de símbolos" están nublando lo sustancial.

No existe acá otra cosa que detentadores de superganancias que no quieren resignar ni un àpice de lo que se llevan, y que están dispuestos a todo para lograrlo.

Ni la renta sojera, ni la renta petrolera, ni la que deviene de la no redistribución de la riqueza.

Por debajo, una inflación negada y sectores varios afectados por esa inflación que en su mayúscula confusión terminan apoyando a uno otro "inflacionista".

Pero a un lado y al otro hay ruido

Ruido de consignas trotkystas, mezcladas con ruidos de fanfarrias militares, ruido de puños en alto con ruido de tractores y vacas, ruido de voceros oficiales justificadores de todo con ruido de vocinglería pseudo progresista.

Ruido de un modelo que cruje, y silencio , mucho silencio cuando se pregunta por una alternativa al eterno "inflación o desempleo", al falso "interior o Buenos Aires" al a esta altura absurdo "peronismo o radicalismo".

Por ahora, sólo es posible sentarse en la cerca, mirar, y bregar por tiempos mejores