miércoles, abril 04, 2007

Memorias de la retaguardia( memorias de las vivencias personales 30 de marzo, 2 de Abril,10 de Abril,15 de Junio de 1982)





Dicen que desde lejos se ve mas claro (joan Manuel Serrat)
El argentino es el único ejército que huye hacia adelante (Jorge Luis Borges)


El 24 de Marzo se recordó un nuevo aniversario del golpe de estado que instauró la peor dictadura militar de la historia argentina.

Este sitio ha hablado del tema muchas veces, y se comentó la marcha que se efectuara el año pasado.

También se ha celebrado un nuevo aniversario del 2 de Abril de 1982. Hoy no se recuerda tanto su inmediato antecedente el 30 de marzo del mismo año. Vale la pena reflexionar sobre esos acontecimientos

Existe un difundido mito, que ha adquirido el status de verdad incuestionable:

"Aquellos que el 30 de marzo estuvieron en la plaza reprimidos por la dictadura dos días antes que el desembarco en Malvinas estuvieron el 2 de Abril en la misma plaza vitoreando a Galtieri" ¿Eso es tan así? ¿Cuál es el motivo por el que se sostiene este argumento "mítico" o "verdadero", según como se lo vea? Veamos:

ANTES DEL 30 DE MARZO

El año 81 había comenzado un relativo "deshielo" de la dictadura militar.

Si bien el aflojamiento era cosmético, algunas pequeñas iniciativas pretendían ser señales que daban cuenta de que el turno de Viola al frente del ejecutivo sería mas flexible que el le correspondió a Videla.

Por ejemplo, al frente del Ministerio de Economía Lorenzo Sigaut reemplazaba a José Alfredo Martínez de Hoz.

Desde el vamos iniciaba su gestión con un supuesto perfil "productivista", convocando a representantes de la UIA como Livio Guillermo Kühl, y con una histórica devaluación del peso precedida por una histórica frase : "el que apuesta al dólar pierde".

Burundarena al frente del Ministerio de Educación pretendía mostrarse mas "amplio" que Llerena Amadeo, y así de corrido.

Volvían algunos, si bien pocos, exiliados famosos como Piero, Marilina Ross, Norma Aleandro o Mercedes Sosa.

La dictadura había sido golpeada con la nominación de Adolfo Pérez Esquivel como Premio Nóbel de la Paz

En ese marco se habían producido algunas movilizaciones durante ese año, y comenzaba de a poco a reorganizarse el movimiento estudiantil.

La CGT estaba dividida entre la colaboracionista con sede en la calle Azopardo y la opositora con sede en la calle Brasil, esta última encabezada por Saúl Ubaldini.

El movimiento estudiantil había organizado una marcha, que por supuesto concluyó en represión en Octubre de 1981.

La CGT había convocado a un acto que se había realizado el 7 de Noviembre frente a la Iglesia de San Cayetano en el barrio porteño de Liniers, que pese a algunas escaramuzas con la policía tuvo en líneas generales un trámite pacífico.

Por otra parte se seguían movilizando los organismos de derechos humanos, en particular las Madres de Plaza de Mayo, que como se sabe, lo venían haciendo desde los momentos mas duros.

Al final de ese año se había convocado a la "Asamblea multipartidaria", que tenía por objeto ir allanando el camino en pro de una salida democrática.

Alguna parte de esta sociedad había comenzado a despertar...

EL CONTEXTO INTERNACIONAL Y EL GOLPE DEL "GENERAL MAJESTUOSO".

La dictadura comenzaba a perder lentamente consenso, pero lo que se criticaba era el plan económico, (que nunca había osado traspasar algunas de las fronteras establecidas por el populismo, lo que sí hizo Carlos Ménem), y los sectores intelectuales comenzaban a pronunciarse en contra de la censura. De la represión ilegal no se hablaba, salvo el caso ya mencionado de los organismos de derechos humanos, partidos de izquierda, y de algún otro muy ocasional acompañamiento político, por parte de los partidos mayoritarios.

La mayor parte de la sociedad entonces comenzaba a molestarse con las recetas económicas de los Chicago Boys, si bien en forma pasiva y silenciosa, pero en cierto modo aún consentía el terrorismo de estado.

En el contexto internacional la "guerra fría" había adoptado un nuevo sesgo.

Tras la derrota de Vietnam, James Carter, pretendió lograr lo que desde entonces practica el Imperio, o sea, cierta "legalidad", o mejor dicho excusas seudo legales, para sus aventuras imperiales.

Así que, de la boca para afuera, comenzó a agitar la cuestión de los "derechos humanos", diciendo que no sólo apoyaba la "lucha por la democracia" del pueblo polaco, por ejemplo, sino que cuestionaba "otras dictaduras" que se encontraban fuera de la cortina de hierro, como la Nicaragüense, la de Irán, o las de Cono Sur incluida la argentina, sin perjuicio de alentar por detrás todo el accionar represivo( y de calificar a los gobiernos comunistas como "totalitarios" y a las dictaduras latino americanas como apenas "autoritarias") .

Reagan, que asumió en el año 81, adoptó una postura guerrerista y conservadora pero algo había quedado de la era Carter. La comprobación de que las dictaduras militares, comenzaban a resultar ineficientes una vez que habían logrado su cometido de exterminar a los grupos antisistémicos. Sin embargo, todavía nadie podía garantizar lo que vendría después.

El cosmético aflojamiento de Viola (que aclarase bien era uno de los principales terroristas de estado), no obstante su histórica frase en Washington de que si los alemanes ganaban la guerra "los juicios de Nuremberg hubiesen sido en Virginia", había puesto nerviosos a muchos uniformados.

Así que el General Galtieri, dio un golpe dentro del golpe, desplazando a Viola, mediante la absurda excusa de que estaba "enfermo".

El nuevo dictador fue saludado con alborozo por las autoridades norteamericanas que lo consideraban un "general majestuoso".

GALTIERI.FALSO POPULISMO Y MANO DURA.

Leopoldo Fortuntato Galtieri volvió desde el vamos a la versión mas pura y dura de los Chicago Boys con Roberto Alemann al frente del Ministerio de Economía, quitando todo sesgo "productivista"

Pero no sólo se había endurecido la economía:

Galtieri había intensificado las detenciones masivas de militantes políticos invocando la "Ley de Seguridad Nacional", y se había producido el secuestro y asesinato de la militante trotskysta Ana María Martínez, cuyo cadáver finalmente apareció, ante algunas manifestaciones de la opinión pública que se empezaban a hacer oír.

Galtieri entretanto, se mostraba frente a las cámaras de televisión ante el público, y pasaba algunos papelones como los reproches que le formulara una anónima Señora y que el no pudo responder.

En este marco, y hacia Enero, algunos medios alternativos y Partidos Políticos, comenzaban a tener información de que se estaba organizando la aventura malvinera.

La idea original era aparentemente, llevar a cabo una fantochada con anuencia de Estados Unidos y Gran Bretaña, que concluiría con la admisión de un esquema de "soberanía compartida", explotación económica para Gran Bretaña, y establecimiento de una base de la OTAN para Estados Unidos.

Esto es coincidente con algunos testimonios recogidos por la Señal Discovery para un documental en la que diversos militares, afirman que el plan original establecía la fecha de Julio, fecha éste en la que según fuentes británicas les hubiese resultado casi imposible enviar a su flota

Deseaba la dictadura alcanzar un consenso que les permitiera a sus personeros eternizarse en el poder.

Pero algo salio mal

EL 30 DE MARZO. ALGUNOS PREPARATIVOS Y LA MARCHA

La CGT Brasil de Saúl Ubaldini había convocado a una movilización cuyo objetivo era llegar hasta la Plaza de Mayo.

Se protestaba en contra del plan económico, pero se reclamaba también un cronograma que desembocase en elecciones generales.

En los días previos diversos grupos de activistas, no sólo sindicales, estaban preparando la movilización.

En la Facultad de Derecho de la UBA, por ejemplo, uno de los grupos políticos actuantes había llamado la atención de forma muy creativa con un audaz acto propagandístico.

En la biblioteca de la facultad había dejado un grabador con un cassette que comenzaba a emitir sonido hacia la mitad de la cinta.

El contenido era una canción de María Elena Walsh interpretada por el Cuarteto Zupay que se llamaba "Dame la mano y vamos ya".

La voz del locutor convocaba a la movilización, mientras de fondo se escuchaban los versos que decían "Siempre nos separaron los que dominan, pero sabemos hoy que eso se termina".

Perissé, el decano de la dictadura, y varios agentes de los servicios de inteligencia disfrazados de "estudiantes" llamativamente de "pelo largo" y "barba", se pararon frente al artefacto, sin atreverse a apretar el botón de "stop", por temor a que explotara una bomba al estilo de la serie "Misión Imposible".

El contraste seguía igualmente siendo importante entre los pocos estudiantes que militaban y la mayoría indiferente.

El día D la cosa se fue dando en un inesperado "crescendo".

Recuerdo que la consigna era constituir pequeños grupos, que avanzaran y se dispersaran.Esos grupos eran tan pequeños como para estar en algunos casos constituidos apenas por parejas reales o ficticias.

Yo comencé la marcha en 9 de Julio y Marcelo T de Alvear. Allí se me acercó un gringo con aspecto de intelectual pacifista que me preguntó en inglés "What´s the demonstration for?", o sea: " Por qué es la manifestación?".

Cuando le expliqué someramente de qué se trataba me dijo "Good luck!", deseándome buena suerte a mí y al resto de los manifestantes con los pulgares en alto.

Al poco tiempo habían comenzado a reprimir y lanzar gases lacrimógenos. Los carros celulares policiales, y patrulleros arremetían a toda velocidad, mientras que la Policía Montada, apodados "sánguches de montura", castigaban desde lo alto de sus caballos.

Los oficinistas de saco y corbata, habitualmente indiferentes, se plegaban indignados. A la altura de Avenida de Mayo y Piedras, vi como una persona mayor, bajaba literalmente a "sopapos" de su caballo a uno de los agentes de la Policía montada.

En Diagonal Norte y Florida vi una nueva carga de la Policía contra un grupo de gente humilde que entonaba el Himno Nacional. En el revuelo fueron detenidas algunas personas, por lo que mi acompañante y yo nos salvamos por milagro.

Se venían produciendo desde semanas atrás una escalada de incidentes con el Reino Unido, empezando por aquel de los trabajadores de las Georgias. Algunos de los manifestantes increpaban a la policía diciendo, por qué no luchaban contra los ingleses en lugar de atacar a los argentinos.

Volví a la noche a mi casa.

Encendí el Televisor.En el canal 7 (A.T.C. por entonces), había un noticiero imposible llamado "60 Minutos", conducido por un periodista mas imposible aún llamado José Gómez Fuentes.

Gómez Fuentes, un grotesco adulador de la dictadura, y el mas grotesco propagandista de la Guerra de Malvinas días después, ignoraba por completo lo que había sucedido esa tarde.

El título principal de esa noche, cuando Abril estaba por comenzar, era: "Sepa con quien dejar a su perro cuando se va de vacaciones".

EL 2 DE ABRIL, y LOS DÍAS POSTERIORES.

El 2 de Abril el país se despertó con la noticia de que las Malvinas habían sido ocupadas.

La primera reacción fue de desconcierto.

Se había convocado una espontánea "manifestación", en Plaza de Mayo, adhiriendo a la operación militar, pero los que habían concurrido no eran desde ya los mismos que habían concurrido tres días antes.

Los componentes de esta manifestación eran sobre todo "espontáneos" estudiantes de colegios secundarios que habían podido "zafar" de clase ante los inesperados acontecimientos, y otros espontáneos ciudadanos, proclives a acercarse a la Plaza de Mayo en momentos consentidos por los medios y por la "mayoría silenciosa", como por ejemplo los triunfos en los mundiales de fútbol.

Algunos de los que habían participado el 30 de marzo estaban todavía detenidos y recién habían sido liberados ese mismo día, la mayoría estábamos en verdad azorados.

Esto obligaba a un rápido reposicionamiento de la opinión democrática que había momentáneamente perdido la iniciativa, ya que la dictadura había pateado el tablero.

Al día siguiente Galtieri convocaba a los partidos políticos y unos días despúes fletaba un vuelo charter a las Islas recién ocupadas, cuyos integrantes por supuesto inmediatamente retornaba a Buenos Aires tras los saludos de rigor. Integraban la delegación algunos de los principales líderes políticos y sociales como Saúl Ubaldini,y un sólo periodista: el hiper obsecuente Gómez Fuentes.

Repentinamente todo el escenario se comenzó a alterar y ésto obligaba a nuevos posicionamientos aún a los propios dictadores.

Los dictadores, por ejemplo, seguían confiando en el "apoyo" de Estados Unidos de Reagan, quien ofrecía su "mediación", pero se veían obligados a iniciar negociaciones con todos los "demonios" de la guerra fría.

Así se los veía correr a dialogar con el Embajador soviético, o enviar al canciller Nicanor Costa Méndez a Cuba a solicitar el apoyo de Fidel Castro.

Los agrupaciones políticas y estudiantiles comenzaban a ser toleradas a propòsito del conflicto, por lo que en diversos ámbitos comenzaban a realizar actos espontáneos.

El consenso general era a favor de la guerra, y eso se reflejaba inclusive en un importante número de voluntarios que se ofrecían como reservistas.

Hoy diversas fuentes militares, argumentan que el adelantamiento de la operación militar, inicialmente planeada para Julio al 2 de Abril, había sido motivada por el anunciado desplazamiento de un submarino nuclear británico que había partido desde Gibraltar.

En una reciente nota del Daily Telegraph el hijo y la viuda de Galtieri, consideran que el incidente con los trabajadores argentinos en las Georgias contribuyó a ese adelantamiento, pero, es indudable que el desembarco fue utilizado como factor político para sepultar lo que se había iniciado el 30 de marzo.

En ese contexto las juventudes políticas comenzaron a realizar reiterados actos, que reflejaban el estado deliberativo que existía entre la opinión pública democrática.

Recuerdo en uno de esos actos a un orador de filiación socialista, comparar la situación que se estaba viviendo con la resistencia a las invasiones inglesas de 1805/6 y el apoyo brindado entonces por los patriotas a la figura de Santigo de Liniers, luego fusilado una vez producida la Revolución de Mayo.

En otra ocasión recuerdo, que en el ámbito de una asamblea de la Comisión Reorganizadora del Centro de Estudiantes de la Facultad de Derecho de la U.B.A., a un ya por entonces veterano militante radical, tildar de "traidora a la Patria" a una militante comunista, que proponía la constitución de una Comisión de "Soberanía y Paz" en apoyo de los soldados que se hallaban en el frente.

Lo de "traidora" era por hablar de "paz". La curiosa posición del miembro de Franja Morada, tenía como transfondo una mera cuestión "porotera" de disputa de espacios, pero reflejaba con esa sobreactuación cual era el "sentido común dominante del momento". Téngase presente que cuando aún no había terminado el conflicto fue justamente el radicalismo la principal fuerza política "desmalvinizadora" .

No había voces disidentes. El único tono discordante lo aportaban las Madres de Plaza de Mayo con su consigna de que "Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también".

EL 10 DE ABRIL.

El 10 de Abril llegó el entonces Secretario de Estado Norteamericano Alexander Haig.

Desde Radio Rivadavia convocaba a la Plaza de Mayo el relator deportivo y adorador de los uniformes José María Muñoz.

En esta movilización podemos decir que efectivamente se habían dado cita buena parte de los que habían estado el 30 de Marzo.

Yo no fuí, algo me retenía en mi casa, aunque no lo sabía definir muy bien por entonces.Hoy, a la vuelta de los años, creo que pesó el temor a ser utilizado, aunque no era conciente de ello por entonces.

Lo vi de todas formas por televisión.

En determinado momento se enfocaba a la concurrencia, mientras se entonaban las estrofas del Himno Nacional. Se oía la voz en off de Gómez Fuentes diciendo : "¡Ahora que distinto que va a sonar o juremos con gloria morir!"

Galtieri se asomó al balcón.

Quiso alzar sus dos brazos imitando el saludo de Perón, pero el brazo izquierdo le fue inmovilizado por uno de sus colaboradores que se hallaba a su lado.

El General etílico inició su discurso con un sonoro:"¡Compatriotas!", por no decir: "Compañeros".

Luego, y párrafo por párrafo iba siendo aplaudido o abucheado según el contenido de la frase.

Por ejemplo. cuando mencionaba a Haig, se pretendía legitimar como "representante", o "Presidente" era abucheado.

Cuando decía que "La Señora Thatcher confunde prudencia con debilidad", o que "no cederemos ni un palmo cuadrado de tierra y "daremos batalla" era aplaudido.

La concurrencia, mayoritariamente peronista, coreaba que "la plaza es de Perón".

La convocatoria era entonces organizada, através de las consignas pretendía apoyar el hecho de la ocupación de las Malvinas, diferenciándose de la dictadura.

La inicativa política había pasado momentáneamente a manos de los dictadores y los partidos políticos iban a la zaga tratando de ocupar el pequeño espacio de legalidad que le había dado la situación.

MAYO Y LOS PRIMEROS DIAS DE JUNIO.

El 1° de Mayo se iniciaron formalmente las hostilidades.

Desde el frente y por televisión sólo se emitían comunicados optimistas.

Las tropas argentinas "iban ganando" . "Estamos ganando" repetía Gómez Fuentes, y agregaba: "Hundimos al Invencible".

Recuerdo a un transeúnte escuchando una Radio Spica, pegada a su oreja. Del otro lado un locutor relataba la guerra como si fuera un partido de fútbol. El oyente me miraba y decía emocionado: " ¡Es increíble lo que están haciendo los pibes!", como si se tratase de la Selección Juvenil.

Como sucedía con París ocupada, y como suele suceder con los países en guerra allí en donde no se desatan las acciones bélicas, Buenos Aires seguía su vida normal, las discotecas tenían la misma concurrencia, y los bares estaban llenos.

Pero comenzaban a aparecer algunas señales preocupantes.

Cierta vez, recuerdo, me hallaba frente a un quiosco de diarios en Corrientes y Maipú que vendía diarios y revistas extranjeros.Revistas como Newsweek por ejemplo, informaban exactamente lo contrario de lo que decían los comunicados militares.Obviamente ¿Quién le iba a creer a esa opinión pública controlada por el "enemigo"?

Ya a principios de Junio los principales oportunistas políticos que seguramente poseían información privilegiada se empezaban a "abrir".

El primero fue el Movimiento de Integración y Desarrollo de Frondizi y Frigerio quien empezó a criticar la "aventura". El segundo fue Raúl Alfonsín.

Alfonsín proponía por entonces un "gobierno cívico-militar de transición", con la Presidencia de Arturo Ilia, y con el mismo Alfonsín como Ministro del Interior.Esto era un año ántes de que denunciara un "pacto sindical militar".Finalmente, y ante el fracaso de su propuesta, Alfonsín también comenzó a esbozar críticas similares a las del MID.

EL 11 DE JUNIO. EL DIA DEL PAPA.

El 11 de Junio llegó a nuestro país Juan Pablo II.

Había viajado previamente a Londres, y ahora lo hacía a Buenos Aires.

El acto se hizo, recuerdo en algún lugar del Parque 3 de Febrero. El ambiente era de "camping" de grupo parroquial. Esos campamentos donde los adolescentes católicos suelen conocerse y desoir por un rato lo mas rígidos preceptos del dogma.

Muchos militantes de diversos partidos, incluídos los de izquierda estábamos "infiltrados" allí.

Mientras la muchedumbre coreaba:"Juan Pablo, segundo, te quiere todo el mundo", un locutor de voz engolada anunciaba que "Juan Pablo estaba por llegar".

Cuando finalmente llegó hizo un discurso invocando la necesidad de celebrar "la paz", una paz que se parecía a lo que finalmente fue, o sea, una rendición incondicional.

Karol Woytila, volvió a cumplir el papel que durante los 80 siempre supo cumplir como aliado de Reagan en su eficaz tarea de triunfar en la guerra fría, como ya lo había hecho en Polonia, o como luego lo hizo en Nicaragua y en muchos otros lugares.

La guerra ya estaba militarmente perdida, pero Woytila venía a asegurar que desde la retaguardia no surgiesen presiones en contrario.

EL 15 DE JUNIO .

El 14 de Junio un ridículo comunicado militar pretendía explicar lo inexplicable.

Las tropas argentinas habían sido derrotadas, luego de haber dicho todo el tiempo que "estábamos ganando".

Le echaban la culpa, graciosamente, a los rifles con mira telescópica que portaban las tropas inglesas y a otros adelantos tecnológicos con los que contaban.

El 15 de Junio se autoconvocó una espontánea marcha para pedir explicaciones.

Recuerdo que en la fría Facultad de Derecho, era imposible convocar a nadie. Los hasta hace un día "patriotas" huían pretextando el parcial de la materia que les iban a tomar según el caso.

Ese día arrojaron gases lacrirmógenos y reprimeron con violencia.Algunos cayeron detenidos.

La multitud estaba furiosa. El periodista Shockron, colaborador de Gómez Fuentes debió huir desesperado, y el camión de exteriores de ATC fue atacado por una lluvia de monedas.

Galtieri tuvo que renunciar. Bignone lo reemplazó y se inició la transición hacia la democracia.

¿ Y DESPUÉS ? ¿QUE ES LO QUE QUEDA?.

Después el hecho mereció diversas lecturas.

Para calificarlo esquemáticamente diríamos que se esbozaron dos posturas "malvinizadoras" y dos posturas "desmalvinizadoras", de derecha y "progresistas" respectivamente.

Las posturas malvinizadoras tenían en común el reivindicar la "gesta" con diversos grados de "acriticidad".

De un lado la postura de la "derecha" miltar tradicional fascistoide que suele preocuparse por las reivindicaciones territoriales mientras entrega el patrimonio nacional.

Esta postura apenas distingue entre algunos militares "malos" que habrían actuado "cobardemente" y otros "buenos" que lo habrían hecho "valientemente".

Esta posición no merece mayores comentarios, pero no careció de influencia.Pensemos que las asonadas carapintadas se hicieron invocando el carácter de presuntos "héroes de Malvinas" de sus líderes cuando en verdad lo que reclamban tras esa fachada era que no se cuestionase ni política, ni judicialmente la represión ilegal.

La otra postura "malvinizadora" es la de izquierda. Se trata de una izquierda fuertemente influída por leninismo que se sabe desde sus mismos inicios estuvo signado por una tensión entre el antibelicismo internacionalista y cierta clase de nacionalismo "antimperialista".

Esta variante involucraba a diversas variantes de exterma izquierda, tanto trtoskysta como estalinista, así como a la llamada "izqueirda nacional".

Este sector destaca el hecho de la ocupación de las Islas Malvinas como aquel momento en que el país se habría hallado "objetivamente" enfrentado el imperialismo, no obstante el carácter ilegítmo de los que encabezaron la acción.

Se parece a aquello que decía León Trotsky cuando afirmba que habría que estar con el "facista" Getulio Vargas, en contra del Imperialismo democrático norteamericano en caso de enfrentamiento.

El nacionalismo de los subordinados es siempre "virtuoso" cuando se enfrenta al Imperialismo.

Esta postura pasa por alto, sin embargo, las motivaciones espúreas que decidieron la acción, la inicial connivencia imperialista, y las propias atrocidades cometicas por las Fuerzas Armadas argentinas durante el conflicto en contra de los propios subordinados, a la que no es ajena la concepción ideológica que los inspiraba.

Existen finalmente dos posturas "desmalvinizadoras".

Una de ellas "progresista", sostenida por gente tan respetable como el escritor Osvaldo Bayer.

Bayer compara la aventura de Galtieri, con la de Hitler en los Sudetes que inició la Segunda Guerra Mundial.

Según Bayer, los Sudetes eran incuestionablemente alemanes, así como las Malvinas son incuestionablemente argentinas, pero eso no justifica una u otra acción, motivadas en ambos casos por ansias de perpetuación y expansión de un poder tiránico.

Esta afirmación viene por supuesto acompañada de la denuncia de todas las atrocidades cometidas por las Fuerzas Armadas Argentinas contra los propios subordinados.

Esto es indudablemente así, pero si bien no lo niega, oculta o disminuye el carácter de agresor y de ocupante ilegal que posee el Reino Unido.

Es cierto que de haber obtenido un resultado "exitoso" es probable que la Junta Militar se hubiese perpetuado en el poder aún con consenso.Pero era imposible que triunfase un ejército entrenado para perseguir a su propio pueblo y subordinarse a los intereses que en el casos Malvinas debían enfrentarse.

Finalmente está la postura desmalvinizadora por excelencia. Esa que en los primeros años de democracia sostuvo Raúl Alfonsín, y que luego fue sostenida a ultranza por todos los neoliberales vernáculos, incluído por supuesto Carlos Ménem.

Según esta línea de argumentación la "locura" consistió en el hecho de enfrentarse a una pelea de imposible victoria contra la primer y la tercera potencia del mundo, potencias contra las cuales todo tipo de enfretamientos (no sólo los bélicos) resultan imposibles.

Haberlos enfrentado, es mas, implica haberse "aislado del mundo".

Esta postura pretende so color de una presunta "racionalidad" diluir el reclamo y ocultar el conflicto estructural subyacente.

Primero porque las potencias que enfrentó nuestro país en la Guerra del Atlántico Sur ha sufrido reveses ante pueblos que se hallaban en una notoria inferioridad de condiciones en diversas oporunidades.

Dichos enfrentamientos fueron por supuesto planteados con otros líderes en otras circunstancias y con otras concepciones, pero no resultan de por sí imposibles.

Tampoco el poder de una potencia resulta inmutable y eterno, ni el único conflicto que se puede plantear es el bélico.Es mas son otras batallas las que se deben dar esas otras en las que también "los milicos asesinos" mostraban que "no sirven" según reza el estribillo popular.

Malvinas entendido como un reclamo territorial de la revista Billiken, significa ocultar "tras el manto de neblinas" que los teléfonos, la energía, el petróleo, las tierras, la cultura, son otras tantas Malvinas, en donde somos colonizados por los mismos que ocuparon las islas.

La guerra del Atlántico Sur fue una acción irresponsable de una dictadura en retirada, pero las Malvinas son argentinas y es un deber reclamar por ellas, y no olvidar quienes estuvieron a nuestro lado en aquellas horas.

Y aparte los del 30 de marzo no fueron los mismos del 2 de Abril, mas allá de los avatares que hubo que pasar durante la guerra