Ya nos hemos referido a este personaje como exutorio de ciertas miserabilidades de la sociedad argentina en otra nota de esta bitácora
Esto es meramente anecdótico pero quizás nos sirva para comprender como los 70 también tuvieron su costado bizarro y como el Bombita Rodríguez de Diego Capusotto no es para nada descabellado.
Ramón Ortega vino a Buenos Aires para salir de la pobreza y con la intención de ser jugador de fútbol.
Cuentan los que jugaron algún picadito con él que no lo hace para nada mal, pero la suerte quiso que se fuese a probar a River Plate sin éxito, ya que como todos sabemos, parece que estaba destinado a triunfar en otras actividades en las que no era precisamente virtuoso.
Lo cierto es que la política no fue ajena a su vida desde tiempos lejanos, aunque siempre fingió "apoliticismo" y que fue un apóstol del "no compromiso".
Su vinculación con la política fue, sin embargo, siempre de características utilitarias y como sabemos en cierto momento de su vida fue Senador, Gobernador, y le pegó en el poste a la Vicepresidencia de la República.
Sus primeras noches en Buenos Aires fueron, al parecer, en una Unidad Básica peronista, sin embargo, en cierta oportunidad en que se entonaba a principios de la década del 60 fingía desmemoria o desconocimiento cuando Julio Sosa le pidió que la cantara en una reunión en el Luna Park.
En el momento en que asumió Onganía declaró que "al país le hacía falta un gobierno fuerte" y luego compuso "La Felicidad" que subliminalmente parecía referirse a la realidad dictatorial de entonces con sumo optimismo, aunque aparentase ser una canción de amor.
No obstante ello, tuvo un pequeño rapto de desprendimiento al gestionar que le permitiesen ingresar al país al cantante norteamericano "nueva olero" y comunista Dean Reed.
Pero pasó el Cordobazo, crecía la ebullición popular y hubo una noche al menos en la que Palito Ortega fue Bombita Rodróguez.
* * *
El Partido Comunista contaba en sus filas con mucha gente de la cultura.
Basándose en ello decidió realizar un acto en la Federación de Box con el objetivo de recaudar fondos ante el secuestro y desaparición del abogado Martins y su cliente Centeno.
El acto se realizaba con la cobertura del Encuentro Nacional de la Juventud Argentina, versión juvenil del acuerdo político llamado Encuentro Nacional de los Argentinos, que por entonces intentaban distintas fuerzas políticas frente al "Gran Acuerdo Nacional" propuesto por Lanusse.
En ese mega evento actuaron artistas de primer nivel que simpatizaban o eran aliados del PC.
Esa noche actuaron entre otros Victor Heredia, Cesar Isella, Alfredo Zitarrosa y tal como el locutor insistentemente anunciaba, el cierre iba a ser con Mercedes Sosa que traía una "sorpresa"
Finalmete la cantante tucumana accedió al escenario,y, tras interpretar unos cuántos temas de su repertorio presentó su "sorpresa".
La "sorpresa" finalmente apareció cuando Mercedes Sosa dijo que tenía el gusto de presentar a su co provinciano Palito Ortega.
Palito avanzó hacia el micrófono y haciendo uso de sus característico tic de mojar el labio superior con la lengua dijo algo que era mas o menos así:
" Hasta aquí los productores no me dejaban cantar las canciones que yo quería en las que denuncio la explotación y la miseria, pero ahora voy a poder hacerlo".
Dicho ésto, comenzó a entonar canciones que harían empalidecer al mismísimo Che Guevara por su contenido revolucionario.
Tres muchachos que se encontraban en lo alto de las tribunas y que no podían creer en esa transformación clandestina comenzaron a gritarle indignados e irónicamente le pedían muchos de los hitis que solía cantar en aquellos años de la "Revolución argentina".
Le pedían a los gritos "¡Tirate al río!" recordando una populachera melodía de esas épocas en las que invitaba a arrojarse al agua a quien no le gustaba que "la gente esté contenta", y "Ya todos saben que vos sos un caradura" , probablemente porque entendieron que tenía un tinte autobiográfico.
Los disidentes fueron rápidamente rodeados por los militantes de "autodefensa" de la "Fede" y debieron retirarse por osar ser tan insolentes con el "camarada" Palito.
Unos meses después se sabe de la equívoca actuación del futuro gobernador de Tucumán ante un "garrón" policial inventado contra el pianista tanguero y afiliado comunista Fulvio Salamanca a pesar de que por entonces filmaba una película en la que interpretaba a u médico militante que partía a ayudar a los pobres y tucumanos, y de la interpretación de su célebre éxito "Yo tengo fe" que también hablaba "del mundo de justicia que ya empieza despertar" cuando se avecinaba la asunción de Héctor J Cámpora.
Demás está comentar la postura de Palito durante la dictadura y sus coqueteos con la Mafia de Miami a la que lo introdujo su amigo Frank Sinatra probablemente en un gesto "piadoso" ante el quebranto económico que le produjera que el tucumano se encargara como manageer de las actuaciones del norteamericano en Buenos Aires.
Dicen que Diego Capusotto se enteró de lo que sucedió aquella noche y que eso le inspiró el personaje de Bombita Rodríguez el "Palito Ortega montonero" y que eso no dejó de ser une metáfora de una época en la que no faltó el heroísmo, pero tampoco situaciones bizarras como ésta.
1 comentario:
dicen de dean read que en realidad era un doble agente, no tan red como se hacia creer. Palito Ortega fue un peon mas, necesario para un tiempo que, mirado para atràs, es mas asombroso que Cien años de Soledad, Hoy me estaba acordando de Chabela, de Lopecito. Ay, pais.
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